Lola Marceli especialmente para www.MeetingVenus.com
by Sherif Awad
Lola: En mi caso, mi familia no está en nada relacionada con el mundo de la interpretación o el espectáculo, pero sí que es verdad que mi padre me inculcó su pasión por el cine. Por eso, mis primeros recuerdos y sensaciones están muy en conexión con las películas que veía de niña y eso fue lo que me hizo acariciar la idea de ser actriz. Luego ya, en la adolescencia, empecé a estudiar Arte Dramático e incluso durante unos años lo combiné con mis estudios de Filología Inglesa en la universidad. Hasta que, a los 22 años, me decidí a viajar a Madrid, y probar suerte como actriz.
Siendo muy niña, las películas clásicas del cine americano en primer lugar. De Katherine Hepburn a John Wayne, de Gene Kelly a Sidney Poitier, de Barbara Stanwyck a Jane Fonda… Y luego empecé a aprender un poco más de cineastas contemporáneos y llegaron los actores y
actrices como Robert de Niro, Meryl Streep, Gene Hackman, Al Pacino… Además, esto también se combinaba con los programas teatrales y las series que emitía TVE, que nos permitía disfrutar de los grandes actores de mi país
…. En ese entonces, esa era la única cadena que teníamos en España. Estoy hablando de antes de 1992.
Después, ya como estudiante, Almodóvar y algunos otros cineastas jóvenes como Pilar Miró, Montxo Armendáriz, Imanol Uribe, Fernando Colomo, etc…marcaron un nuevo camino en el cine. Y cuanto más veía más me interesaban otras cinematografías como la francesa, la inglesa, la italiana, la china…
Y por supuesto, desde el momento en que empecé a estudiar Arte Dramático, las ganas de conocer y aprender me abrieron las puertas de otras muchas sensibilidades en todos los campos, la música, la danza, la pintura… ¡muchas ganas de aprender!
Creo que lo principal es que es una actividad que no se te acaba nunca. Cuando eres muy joven tienes que aprender a encontrar tu voz, tu manera de hacer, tu forma de entender tanto el oficio como la profesión. Y de repente te haces mayor y te das cuenta de que, independientemente de cómo sea tu carrera, sigues arrastrando los mismos miedos y las mismas ilusiones. Y fundamentalmente las mismas ganas de seguir enfrentándome a nuevos desafíos… Y además, lo bueno de esta profesión es que siempre te sigues formando; siempre hay un director, un profesor, una técnica que puede suponer un nuevo lenguaje con el que trabajar. Por eso también es importante, tener la humildad de, cada cierto tiempo, intentar aprender algo distinto, algo nuevo que te saque de la zona de confort.
No puedo ser muy consciente de si influyó o no en los demás, pero como yo también soy público creo que todos tenemos un sexto sentido para saber identificar el talento y el buen trabajo en los otros. Y algo muy importante, el compromiso con el trabajo hecho. Y la coherencia, sea cual sea el formato.
Una de las cosas que justamente más está cambiando actualmente es que ahora tu trabajo puede llegar a cualquier lugar del mundo y uno no deja de sorprenderse cuando recibes felicitaciones o el “feedback” de personas que antes era muy improbable que pudieran llegar a conocerte. Pero al mismo tiempo también te hace apreciar, con más mimo y cuidado, el trabajo “en pequeño”. Un actor, un cantante, sobre el escenario, frente a un público que es capaz de sentirlo incluso respirar sigue siendo una de las cosas más mágicas que existen dentro de nuestro trabajo. Eso sí, en cualquiera de los dos formatos, siempre quieres más y tener margen para hacerlo mejor.
-De acuerdo con usted, describa la situación actual de la industria del arte/entretenimiento en su país?
Ahora mismo, se está exportando talento español a todo el mundo. Y no solo por los grandes artistas más mediáticos. Hay directores y actores españoles, que están desarrollando carreras internacionales y que están haciendo cosas maravillosas… Pero es verdad que levantar cualquier proyecto sigue siendo un proceso complicado. Encontrar el hueco para producir, por ejemplo, que es una parte a la que me he acercado en los últimos tres años, sigue siendo como ir a pescar…Necesitas mucha paciencia y mucha suerte.
-¿Cómo puedes apoyar a tu país en sus esfuerzos socioeconómicos a través de tu creatividad?
Bueno, indudablemente formamos parte de una industria audiovisual y artística que, en el caso de nuestro país, está dando muchas satisfacciones, tanto desde el punto de vista económico como de reconocimiento a nivel internacional. Y yo hago lo que debo como ciudadana, que es contribuir a la Hacienda del país mediante mis impuestos e intentar dar a respetar mi profesión y el buen hacer de tantos y tantos profesionales. Porque este trabajo es siempre un trabajo en equipo.
-¿Cuáles son tus proyectos actuales y futuros?
En los últimos tres años, como decía antes, he abordado un proyecto no solo desde mi faceta de actriz, sino también ayudando en la producción. Se trata de una película que ha dirigido Steve Jacobs, que ya me dirigió en Australia haciendo “La Spagnola” y que se llama “Siempre he querido dirigir”. Y en estos momentos estoy comenzando a rodar una serie para TVE, “Mercado Central”, proyecto con el que estoy muy ilusionada porque estoy trabajando con un equipo estupendo y con muchas ganas de disfrutar. Y también terminando la tercera temporada en la serie “Élite” de Netflix.